martes, 19 de mayo de 2009

PROGRAMA CRISTINA









ENTREVISTA DE LA REVISTA PEOPLE EN ESPAÑOL

Por NORMA NIURKA

La niña linda de las novelas mexicanas no se conformó con ser una cara bonita, sino que emprendió
nuevos caminos hasta convertirse en la empresaria y mujer que es hoy. THALÍA, de 37
años, además es esposa y mamá —ojo, no está embarazada como se ha especulado— y en marzo
publicó Thalía: ¡Radiante! (Chronicle Books), una guía para tener un "embarazo fabuloso".
¿Qué es un embarazo fabuloso?
Aceptar tu embarazo, verlo como una forma decrecimiento espiritual; ver el cambio de tu cuerpo, esa voluptuosidad, esa vida que crece dentro de ti, como una forma de ser recipiente de un alma que está llegando al mundo.
¿Dar a luz fue como esperabas?
Tuve 33 horas de parto, pero fue el momento del alumbramiento de mi vida. Las expectativas sobrepasan cualquier pensamiento o imagen que te hayas creado.
¿Cómo ha cambiado tu vida en estos años?
He dejado atrás patrones de conducta que heredé de mi familia, de mi sociedad y me he dado la oportunidad de vivir en otra cultura. Todos evolucionamos, pero tenemos que aventarnos a salir de la zona de confort y aprovechar las oportunidades.
¿Cómo ves ahora aquel tiempo de telenovelas, conciertos, discos y giras?
Cuando pienso en esa época me veo a mí en el centro de un huracán gigantesco, yendo hacia arriba, con los brazos para arriba, vestida de blanco, buscando dónde está la salida.
¿Por qué proseguías en esa vorágine?
Era una obsesión con el mundo de esa Thalía; empecé a trabajar a los 7 años sin parar.
¿Es Tommy Mottola buen esposo?
¡Excelente con mayúscula! Y padre excelente, también con mayúscula.
¿Cómo encajaste en el mundo norteamericano?
No fue fácil. Estás acostumbrada a tu sociedad, a tus horarios, a contar un chiste en tu idioma y aquí es otra estructura. Pero todo me ha ayudado a madurar y a consolidar otro de mis grandes sueños: ser empresaria.
¿Qué te hubiera gustado ser en lugar de artista?
Una de mis frustraciones es no haber sido sicóloga, pero no lo he sido yet... ¡Todavía hay tiempo!
¿Qué le pides ahora a la vida?
Conservar mi salud y ese arraigamiento a lo positivo que es parte de mi ADN.
¿Es este el momento más importante de tu vida?
El momento más importante de mi vida es el presente, en cualquier momento, porque es el único que tengo.


No hay comentarios: