Luego de cuatro años sin hacer apariciones públicas en México, la cantante y actriz Thalía visitó el país y dijo que está a la espera de un papel en televisión que la seduzca por completo, y hasta que no llegue esa oportunidad seguirá centrada en la música. “Como actriz, me estoy reservando para ese papel que me haga dejarlo todo a un lado”, aseguró con una sonrisa.
Después de sufrir una rara enfermedad, que, según sus propias palabras, “me hizo pensar muchas veces y muchas noches en la muerte, pero tomaba fuerzas y veía a mi hija y me sentía otra vez viva”, decidió hacer un proyecto que tituló Primera fila, el cual presentó la tarde de ayer a periodistas y clubes de fans.
Recordada por sus actuaciones en las telenovelas María la del barrio y María Mercedes, entre otras, dijo que siempre le ofrecen programas y melodramas, pero aseguró que ella no va a dar el sí hasta que diga “esto vale la pena”.
Thalía confesó que la noche del martes cenó con Benny y Diego, antiguos compañeros de Timbiriche, y comentó que también llegó el productor Pedro Torres, quien le propuso convertirla en una de sus Mujeres asesinas. “El ofrecimiento me está coqueteando, pero todavía no estoy segura”.
Al ser cuestionada por su larga ausencia en el país, la intérprete de “Amor a la mexicana”, declaró: “vengo mucho a mí país, pero de incógnito, a disfrutarlo, a las playas”. Ahora la cantante vive en Miami junto a su esposo Tommy Motola y su hija Sabrina Säkae, nacida en octubre de 2007.
Para Thalía, México es “bello, hermoso, con ganas de merecer algo más grande” y deseó que la gente pueda “caminar por su patria”, en referencia a la inseguridad que se vive.
A pesar de llevar más de cinco años casada, a la cantante no le gusta que le llamen señora, ante el cual dijo “se oye cañón, acuérdate que soy la del barrio de la Santa María”, en referencia al lugar donde vivió.
Además, confesó que la fama la cegó por mucho tiempo. “Claro que la fama te deslumbra, te vas poniendo máscaras encima hasta que ya no te reconoces”, pero también aseguró “todas las Thalías me han dejado galardones, cicatrices de guerra y tatuajes en el alma”.
Por eso, con su producción Primera fila, compuesta de nuevas canciones y grabada en vivo, buscó “pulverizar estereotipos”. “Estoy realizada, y me acepto tal como soy”, indicó.
La cantante se describió como una usuaria habitual del Twitter, donde le gusta poner mensajes positivos y además seguir a Joel Osteen, un predicador cristiano, y al gurú de la autoayuda Deepak Chopra, así como a la periodista mexicana Adela Micha.
Y finalizó: “Me fui de México por amor, no por la inseguridad. Yo soy una chica de barrio y él (Tommy Mottola) también. Vivimos un cuento de hadas y somos muy felices de ser una pareja”.
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